miércoles, 10 de agosto de 2011

SI UNA ESPINA ME HIERE....

Si una espina me hiere, me aparto de la espina,
...pero no la aborrezco! Cuando la mezquindad
envidiosa en mi clava los dardos de su inquina,
esquívase en silencio mi planta, y se encamina hacia más puro
ambiente de amor y caridad.

¿Rencores? ¡De qué sirven! ¿Qué logran los rencores?
Ni restañan heridas, ni corrigen el mal.
Mi rosal tiene apenas tiempo para dar flores,
y no prodiga savias en pinchos punzadores:
si pasa mi enemigo cerca de mi rosal,

se llevará las rosas de más sutil esencia;
y si notare en ellas algún rojo vivaz,
será el de aquella sangre que su malevolencia
de ayer vertió, al herirme con encono y violencia,
y que el rosal devuelve, trocado en flor de paz!


...........................AMADO NERVO- Escritor Mexicano........................................................



Muchas veces nos complicamos la vida  llenandonos de rencores, sin darno cuenta que esos rencores nos hacen más daño de lo que pensamos. Hoy los invito a aprender a perdonar y a disfrutar los regalos que Dios nos da.  Amemos al projimo sin importar de quien se trata. La felicidad esta en tus manos.







No hay comentarios:

Publicar un comentario